El equipo alevín de Grupo Roma B. Murgi finaliza noviembre en la última posición de la liga, acumulando derrotas en todos sus encuentros a falta de un partido para terminar la primera vuelta. Aunque las chicas todavía no han experimentado la victoria, el equipo sigue trabajando de forma constante y con un gran compromiso. La diferencia técnico-táctica y física con el resto de los equipos de la liga es considerable, ya que la mayoría de nuestras jugadoras son minis de primer año, y algunas están viviendo su primera experiencia en el baloncesto federado. Esto hace que sea muy complicado competir contra equipos más maduros y experimentados.

A pesar de la adversidad, el trabajo semanal sigue siendo muy positivo. El equipo continúa con su enfoque en mejorar tanto a nivel técnico como físico, con el objetivo de ser más competitivas en la liga, pero sobre todo mirando hacia el futuro. Las jugadoras se muestran comprometidas y no faltan a los entrenamientos, esforzándose en cada sesión y demostrando mejoras notables, aunque las lesiones, que han afectado a algunas jugadoras, han dificultado la continuidad en los entrenamientos.

A pesar de las dificultades, el grupo sigue unido, disfrutando del baloncesto y de la camaradería, lo cual es la base para asentar los cimientos del equipo. El compromiso, el esfuerzo y la paciencia son fundamentales, y con el tiempo, se espera que este grupo se convierta en un equipo más competitivo y difícil de batir. Desde aquí, deseamos la pronta recuperación de Marta y Ainara, y que las lesiones respeten a las chicas para que puedan seguir creciendo como jugadoras.

El camino hacia la mejora continúa, sin prisa pero sin pausa. ¡Vamos a seguir trabajando!